La vaquera de la Finojosa, Íñigo López de Mendoza, marqués de Santillana

Moza tan fermosa
non vi en la frontera,
como una vaquera
de la Finojosa.
Faciendo la vía
del Calatraveño
a Santa María,
vencido del sueño,
por tierra fragosa (abrupta)
perdí la carrera, (me perdí)
do vi la vaquera
de la Finojosa.
En un verde prado
de rosas y flores, (tópico del locus amoenus)
guardando ganado
con otros pastores,
la vi tan graciosa
que apenas creyera
que fuese vaquera
de la Finojosa.
No creo las rosas (No creo que las rosas)
de la primavera
sean tan fermosas
ni de tal manera,
fablando sin glosa, (claramente, sin necesidad de aclaraciones)
si antes supiera
de aquella vaquera
de la Finojosa.
No tanto mirara
su mucha beldad, (belleza)
porque me dejara
en mi libertad. (tópico de la cárcel de amor)
Mas dije: «Donosa (gentil)
(por saber quién era),
¿dónde es la vaquera
de la Finojosa?»
Bien como riendo,
dijo: «Bien vengades;
que ya bien entiendo
lo que demandades:
non es deseosa
de amar, nin lo espera,
aquesa vaquera
de la Finojosa.»

La Finojosa es la actual Hinojosa de Duque (Córdoba), que se encontraba en la frontera entre Castilla y Al-Ándalus.